Quicio

13:36



Parte de las puertas o ventanas en que entra el espigón del quicial, y en que se mueve y gira.

Fuera de quicio
1. loc. adv. Fuera del orden o estado regular.

Sacar de quicio a alguien
1. loc. verb. Exasperarlo, hacerle perder el tino.


Hay personas que hacen la vida más bonita, otras que te son indiferentes y algunas son como un castigo, con la habilidad innata de desatar lo peor de uno mismo. 

No está mal tropezar de vez en cuando con alguien que te saca de quicio. Es un buen espejo dónde mirarte. Si te dejas llevar por su juego, pierdes los papeles y acabas sin razones porque a gritos no puedes argumentarlas.

Él, mientras, no pierde nada. 
Tú si. 

En algún momento, acabas convertido en el que levanta la voz, el que gesticula violeto, el que se derrumba sin control, hasta que después de la tempestad, llega la calma. 
Y entonces, te sientes culpable por haber dejado que la rabia suba desde la garganta al cerebro para envenenarte.

Tal vez no puedes evitar soportarlo, pero si controlarlo y dejar de ser su rehén. De ti depende enfadarte o dejarlo atrás, entrar al trapo o ignorarlo, dejarlo crecer o minimizarlo. Ese dominio, lo tienes y cuanto menos representa esa persona para tí, más fácil es.

Sin concesiones. Ni un cambio ni un ápice de duda.

Míralo despacio. 
No es tan grande como para desviarte.

Placer

10:55


- Rozar con los pies las sabanas recién puestas
- Los dibujos de los niños pegados en la nevera
- Andar descalza por casa
- Tropezar con un ambientador que recuerda La Llicorella
- Un aperitivo que se va de las manos

Teoría del Idiota Masculino

20:18


Tal vez a los investigadores del Instituto de Medicina Celular de la Universidad de Newcastle les costó mucho llegar a la conclusión de que los hombres son más absurdos que las mujeres y para poder formular la Teoría del Idiota Masculino con un revestimiento seudocientífico.

Con observar un poco, más que suficiente. No era necesario recrearse en ejemplos como el del terrorista que abrió su propia carta bomba cuando le llego devuelta por franqueo insuficiente o el del latín lover que utilizó la lijadora como artículo erótico y perdió un testículo.

Más desconcertante en la forma que en el fondo. 

Contención. Estoy por añadir un ejemplo nuevo.


WeronikaGesicka